Biblioteca Evita Capitana

El Libro Verde - Capítulo 21

Los méritos de la tribu

Dado que la tribu es una gran familia, proporciona a sus miembros beneficios materiales y ventajas sociales similares a los que la familia brinda a los suyos, pues la tribu es, en esencia, una familia secundaria. Es importante destacar que, dentro del contexto tribal, un individuo puede permitirse ciertas conductas toscas que no adoptaría en el seno familiar. Sin embargo, debido al reducido tamaño de la familia, no se ejerce una supervisión constante, a diferencia de la tribu, donde sus miembros sienten de manera continua que están bajo su vigilancia.

Considerando estos aspectos, la tribu moldea un patrón de conducta en sus integrantes, desarrollando una educación social que resulta más elevada y noble que cualquier instrucción escolar. La tribu es una escuela social en la que sus miembros se crían absorbiendo ideales superiores que se transforman en un modelo de comportamiento para toda la vida. Estos valores se arraigan de manera automática a medida que el ser humano crece, a diferencia de la educación de aula, con sus programas formales, que son impuestos y gradualmente olvidados con el desarrollo del individuo. Esto ocurre porque la educación escolar es formal y obligatoria, y el individuo es plenamente consciente de que le es impuesta.

La tribu es un "paraguas" social natural para la seguridad social. En virtud de las tradiciones tribales, brinda a sus miembros una protección colectiva a través de multas, venganza y defensa; es decir, protección social. La sangre es el factor primordial en la formación de la tribu, pero no es el único, ya que la afiliación también desempeña un papel en su constitución. Con el paso del tiempo, las diferencias entre el vínculo de sangre y la afiliación se desvanecen, dejando a la tribu como una unidad social y física, aunque en su esencia sigue siendo, en origen, una unidad basada en la sangre.

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